Dentro de las herramientas que hoy se encuentran disponibles para mejorar los procesos de diseño y construcción, el BIM (Building Information Modeling) permite la gestión de la información y el perfeccionamiento de los proyectos durante su desarrollo, mediante una cultura colaborativa de los profesionales y una práctica integrada de los diseños.

Así lo explica Carolina Muñoz, gerente de Desarrollo de Aitue, quien precisa que el uso de esta herramienta desemboca “en un modelo del proyecto que facilita tanto su entendimiento como la posibilidad de detectar interferencias, colisiones y errores de manera gráfica y fácil de visualizar”.

Producto de lo anterior, y para sacar el máximo partido de esta herramienta, Aitue organizó una capacitación de gestión y administración de BIM en la que participaron responsables de las áreas inmobiliaria y constructora, lo que permitió transmitir conceptos básicos y generales, como desarrollar ejercicios prácticos que permiten mejorar los procesos existentes, integrando la mirada de ambos sectores.

“El BIM permite disponer en todo momento de cualquier información que se requiera, tanto de diseño como técnica, de cubicaciones e incluso costos y plazos de ejecución, como también de mantenimiento, dependiendo del nivel de datos que se vaya proporcionando al modelo”, detalla Muñoz.

La gerente de Desarrollo cuenta que “la metodología permite hacer modificaciones en tiempo real sobre el modelo en un entorno compartido de datos en que todos los profesionales intervienen, actualizando automáticamente todos estos parámetros, lo que evita errores y omisiones entre especialidades y, por ende, las consultas durante el proceso constructivo”.

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